Lea la transcripción del video devocional de hoy.
Como alguien que creció en la iglesia, siempre escuché que estamos llamados a ser guiados por el Espíritu, o que necesitamos ser llenos del Espíritu. Siempre pensé que ese llamado estaba reservado para pastores, líderes de la iglesia o aquellos con algún título bíblico. Nunca me sentí capacitado porque pensaba que era para profesionales, por así decirlo.
Cuando comencé a estudiar las Escrituras, descubrí rápidamente que puedo vivir una vida guiada por el Espíritu. De hecho, es importante que entendamos que cuando fuimos salvos, cuando entregamos nuestras vidas al Señor, recibimos el Espíritu Santo. El Espíritu Santo vive en nuestro interior.
¿Qué significa ser guiado por el Espíritu?
Esto nos lleva a preguntarnos qué significa ser guiados por el Espíritu. Hoy quiero responder a esa pregunta. Una de las funciones del Espíritu Santo es convencernos de nuestro pecado. Si queremos ser guiados por el Espíritu, debemos responder a su convicción.
Hay días en que no doy en el blanco, y sé que no lo he hecho, y el Espíritu Santo me recordará que tú no eres así. Regresa al Señor. Arrepiéntete de tu pecado. Conviértete, porque la gracia está disponible. El Espíritu Santo nos convence de nuestro pecado.
En Gálatas capítulo 5, versículos 22 y 23, se nos dice que el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, bondad y dominio propio. Si nos dejamos guiar por el Espíritu, Pablo nos dice que debemos vivir en amor. Seremos amables con nuestro prójimo. Ahora bien, eso no significa que vayamos a vivir una vida perfecta. No, pero mostraremos esas cualidades dondequiera que Dios nos haya puesto. Cuando erremos, el Espíritu Santo nos convencerá una vez más.
Llenando nuestras vidas con la Palabra de Dios
Ahora bien, otra manera en que somos guiados por el Espíritu es llenando nuestras vidas con la Palabra de Dios y llenando nuestra mente a diario. Es una decisión diaria donde elijo meditar en las cosas de Dios. Cuando lleno mi mente con la verdad de la Palabra de Dios, sé cuándo el Espíritu Santo me hablará, porque el Espíritu Santo no me dirá que haga algo que contradiga la Palabra de Dios.
Descansando en la obra terminada de la cruz
Quiero cerrar con esto en Gálatas, capítulo 5, versículo 1. Pablo dice algo interesante: «Así que Cristo verdaderamente nos liberó. Ahora asegúrense de permanecer libres». Y escuchen esto, dice: «No vuelvan a estar sujetos a la esclavitud de la ley». Les recuerda a los gálatas que comenzaron esta carrera cristiana con la gracia de Dios. Creyeron en el Señor, y él les dice: «No regresen al legalismo, porque nuestra tendencia como humanos es querer hacer cosas para Dios y pensar que nuestras acciones agradarán al Señor». Les dice: «No, tienen que descansar en la obra consumada de la cruz. Recuerden que lo que Jesús hizo por nosotros es suficiente».
Si vamos a ser guiados por el Espíritu, tenemos que descansar en la obra terminada de la cruz y confiar en que lo que Jesús hizo por nosotros en la cruz fue suficiente.
