Lea la transcripción del video devocional de hoy.
En un mundo en el que las sociedades surgen y caen, los líderes cambian, hay agitación política e incluso nuestras instituciones más estables pueden derrumbarse, ¿sobre qué vas a construir tu vida?
Este versículo tiene una respuesta, y la respuesta trasciende toda inestabilidad terrenal. La respuesta es que hay un reino eterno y un Rey que gobierna por todas las generaciones, porque los reinos terrenales —lo saben— van y vienen.
Sabemos muy bien que incluso la sociedad en la que vivimos es frágil y susceptible a la decadencia y la derrota. Recuerda que formas parte de otro reino. Formas parte de un reino eterno. Recuerda que sirves a un Rey, y el Rey al que sirves no será derrocado. Él gobierna por todas las generaciones.
Cómo se aplica esta verdad a tu vida
¿Cómo se aplica esa verdad a tu vida? ¿Cómo se aplica a la mía? El mundo que nos rodea es inestable. El mundo del que formamos parte está en constante transformación. Pero el reino de Dios, del que también formamos parte los cristianos, no se mueve ni cambia.
Donde vivo hay muchas colinas; algunos las llaman montañas. Algunas mañanas te despiertas y esas colinas, esas montañas, están ocultas por nubes, niebla o neblina, y a veces ni siquiera puedes verlas. Si esperas lo suficiente, esa niebla, esa neblina, pasará, y volverás a ver esa antigua montaña en pie.
Cristiano, estás en esa montaña. El mundo que nos rodea va a cambiar y, al final, nos pasará de largo. Nuestra vida en el reino de Dios se cimienta sobre esta roca.
Vivir sin miedo
Aquí está la aplicación: No tenemos por qué temer ni preocuparnos. ¿Por qué no haces esto hoy? ¿Por qué no consideras tus ansiedades sobre el futuro? ¿Por qué no consideras las cosas que te inquietan? Quizás sean la agitación política. Quizás sean las incertidumbres sociales. Quizás sean los problemas terrenales. Quizás sea tu propio dolor y sufrimiento, o las dificultades familiares.
Sea cual sea tu temor o ansiedad, ¿por qué no recuerdas hoy que formas parte de un reino eterno que siempre permanecerá? Recuerda el Salmo 145, versículo 13: « Porque tu reino es un reino eterno, y tú gobiernas por todas las generaciones. El Señor siempre cumple sus promesas. Es misericordioso en todo lo que hace».